Noticia publicada el: 10/02/11
Alianza operativa entre frigoríficos Pacífico e Itata da paso a la planta de frío más grande de Chile
Frigorífico Pacífico S.A. y Frigorífico Itata anunciaron recientemente la firma de una alianza para unir operaciones y satisfacer de mejor manera los requerimientos del mercado. En conversación con PESCA al día, el gerente general de la nueva firma, Víctor Allendes, explicó los detalles de este nuevo conglomerado que dispondrá con más de 22.100 posiciones de pallets para la atención de sus clientes, tanto del área congelado como refrigerado, transformándolo en el actor más relevante a nivel nacional en servicios de frío.
Las inversiones que se asociaron suman unos US$ 28 millones: los US$ 17 millones que costó instalar entre el 2004 y el 2008 el Frigorífico Pacífico -ligado a la familia Stengel- y los US$ 11 millones que Itata -controlada por la familia Sarquis- desembolsó en su planta durante la última década.
Ambas compañías llevan años en el negocio del cuidado de productos congelados y servicios logísticos asociados a esta actividad: almacenamiento, preparación de pedidos, administración de inventarios, entre otros. Con anterioridad a la alianza, Pacífico prestaba servicios a terceros e Itata se centraba principalmente en el manejo de sus propios productos, fundamentalmente, jurel congelado.
"Para desarrollar estas funciones, este nuevo conglomerado que opera bajo el nombre y administración de Frigorífico Pacífico S.A. cuenta con una capacidad instalada de más de 22.000 posiciones para pallets destinadas a la rotación de productos con control de temperatura; andenes climatizados que permiten recibir y despachar productos en forma eficiente en el mínimo tiempo posible; y sistemas de información en línea", explicó a este medio el gerente general de la compañía, Víctor Allendes.
La firma Icestar, otra de las grandes del sector, posee una capacidad de 15 mil pallets y hasta antes de la alianza entre Pacífico e Itata se alzaba como la de mayor envergadura a nivel país.
Dentro de las más de 22.000 posiciones (cada pallet equivale a 1,2 t, es decir, aproximadamente 30 mil t de almacenamiento) que dispone el frigorífico -posee certificación ISO 9001-, existe la posibilidad de mantener productos refrigerados o secos. "Nuestras instalaciones cuentan en la mayoría de las bodegas o cámaras con racks, lo que nos permite tener un control adecuado de la rotación de inventario de acuerdo con los requerimientos de los clientes", añadió el ejecutivo.
El conglomerado ubicado en pleno corazón del polo industrial de Talcahuano (Región del Biobío), se sitúa a minutos de los puertos más importantes de dicha región. "Se trata de una obra civil de proporciones y de un ejemplo de tecnología aplicada al servicio de clientes exigentes, con necesidades dinámicas", puntualizó Allendes.
Alentador 2011
Para este año las expectativas son alentadoras, ya que la nueva firma atenderá la demanda de la producción frutícola, ovina, bovina, avícola, además de productos del mar, como choritos, jibia, centolla, calamares, jurel y salmones, entre otros.
"El monto de venta que estimamos de venta para el 2011 es de aproximadamente US$ 3,5 millones", detalló el gerente general.
Tecnología, eficiencia y sistema de información
Uno de los innovadores servicios que ofrece Frigorífico Pacífico, es el sistema WMS de desarrollo interno que cumple con todos los requerimientos necesarios para administrar la información de los clientes. "Al ser de desarrollo interno nos permite recoger e implementar en la mayoría de los casos requerimientos no contemplados inicialmente", argumentó Allendes.
Este WMS permite traspasar a archivos planos la información necesaria para el manejo de stock. Para ello, Frigorífico Pacífico cancela por un servicio externo que se encuentra disponible en la página electrónica de la compañía (www.frigopacifico.cl), en ésta, y a través de una clave y contraseña, los clientes podrán contar con una conexión FTP -aún no se encuentra operativa- y de esa manera estar al tanto del manejo de sus productos.
"Contamos con respaldos permanentes de la información en servidores dedicados y separados de la operación normal", expresó el gerente general.
Seguimiento total
Parte de la sintonía fina que Frigorífico Pacífico tiene con sus clientes es la completa compatibilidad que sus sistemas tienen con la trazabilidad de los productos que se almacenan en las cámaras. "Es exigido por los mercados y por ello mantenemos un seguimiento completo aquí dentro. Cada vez que se mueve un pallet queda registrado qué se hizo y cuándo se hizo. Por eso, si en un momento determinado un cliente envía un camión con las cajas sueltas, y nosotros pistoleamos (registramos) al armar el pallet cada una de las cajas, le enviamos esa información y así él sabe exactamente qué tiene en cada pallet, y cuando embarca sabe exactamente lo que se embarcó", precisó Allendes.
Servicios
Entre los servicios que dispone el frigorífico más grande de Chile, se cuentan un andén climatizado para productos refrigerados y congelados con niveladores de andén y sellos térmicos; creación de códigos y descripción de productos con 24 horas de anticipación a la recepción; recepción de ASN (aviso anticipado de recepción) en archivo plano; descarga oportuna y rápida de camión captura de datos relevantes del producto en base a la tarja del cliente; aplicación de film al pallet; ingreso de carga al sistema informático de identificación de pallets con código de barras; traslado a cámara en tiempo mínimo; estiba en cámara; informe y confirmación electrónica de recepción; entre otros.
jueves, 10 de febrero de 2011
Noticia publicada el: 10/02/11
Fetrapes manifestó temor ante despidos en empresa fusionada
La Federación de Trabajadores Pesqueros y Ramas Afines Zona Centro Sur de Chile (Fetrapes), organización que representa a trabajadores de plantas reductoras (harina de pescado), conserveras, congelados, transporte de pescado, investigación, tripulantes, mantenciones y servicios de las comunas de Talcahuano, Tome, Coronel y Lota (en la Región del Biobío), emitieron un comunicado con su visión acerca de las consecuencias sociales producto de las fusiones y/o absorciones de empresas pesqueras.
El presidente del gremio, Juan Montenegro, sostuvo que ayer miércoles 9 de febrero Pesquera Bio Bio, empresa absorbida por Camanchaca habría comunicado el despido del 42% de sus trabajadores, con contrato indefinido, de todos los departamentos y con una gran trayectoria laboral dentro del sector.
Fetrapes hizo un llamado a la autoridad pesquera competente "a no hacerse cómplice de la industria pesquera avalando o justificando los despidos cuando estas son sólo decisiones económicas de las empresas de fusionarse".
Fetrapes manifestó temor ante despidos en empresa fusionada
La Federación de Trabajadores Pesqueros y Ramas Afines Zona Centro Sur de Chile (Fetrapes), organización que representa a trabajadores de plantas reductoras (harina de pescado), conserveras, congelados, transporte de pescado, investigación, tripulantes, mantenciones y servicios de las comunas de Talcahuano, Tome, Coronel y Lota (en la Región del Biobío), emitieron un comunicado con su visión acerca de las consecuencias sociales producto de las fusiones y/o absorciones de empresas pesqueras.
El presidente del gremio, Juan Montenegro, sostuvo que ayer miércoles 9 de febrero Pesquera Bio Bio, empresa absorbida por Camanchaca habría comunicado el despido del 42% de sus trabajadores, con contrato indefinido, de todos los departamentos y con una gran trayectoria laboral dentro del sector.
Fetrapes hizo un llamado a la autoridad pesquera competente "a no hacerse cómplice de la industria pesquera avalando o justificando los despidos cuando estas son sólo decisiones económicas de las empresas de fusionarse".
miércoles, 9 de febrero de 2011
Noticia publicada el: 09/02/11
Editorial: Protección de un gran recurso pesquero
A continuación reproducimos una editorial publicada hoy por El Mercurio:
"La pesca del jurel ilustra las dificultades en las que se desenvuelve la captura de bienes (los peces) sobre los cuales no hay -hasta este momento- posibilidad de adjudicar derechos de propiedad. Así, la pesca indiscriminada de una especie -en este caso el jurel- impone riesgos de extinción de ella si la tasa de reproducción es menor que la de su captura. A su vez, la tasa de reproducción no es completamente conocida, sino solo puede ser estimada, por la dificultad de medir con precisión la biomasa existente y conocer con detalle la biología de su desarrollo. Los países más activos en las pesquerías mundiales intentan ponerse de acuerdo frente a este problema imponiendo cuotas de captura. Sin embargo, pueden controlar directamente sólo lo que ocurre dentro de las zonas de su soberanía marítima -200 millas en el caso chileno-, pero lo que se haga más allá de ellas por parte de los buques factoría queda fuera de su control, ya que éstos puedes autoabastecerse o tener flotas de apoyo que lo hagan, burlando así los controles y evitando sanciones, a menos que sus países de origen tomen acciones al respecto.
En 2006, Chile, Australia y Nueva Zelanda copatrocinaron una negociación internacional multilateral destinada a la creación de una organización regional de pesca, con el propósito de contribuir a conservar los recursos pesqueros en el pacífico Sur y a ordenar su manejo. En noviembre de 2009 se adoptó el texto de la Convención para la Conservación y Ordenamiento de los Recursos Pesqueros en Alta Mar en el Océano Pacífico Sur. Hasta esa fecha, los 26 países y entidades participantes en las negociaciones, 12 han firmado esa convención, Nueva Zelanda, Islas Cook, Chile, Colombia, Perú, Islas Faroe (incluyendo su ratificación), la Unión Europea, China, Australia, Corea, la Federación Rusa y Cuba.
Las medidas previstas por dicho instrumento apuntan a determinar una captura total permisible y a distribuirla entre quienes participen en la pesquería. Eso condujo a una "carrera olímpica" entre los países para mejorar su participación relativa en dicha captura, y comenzar la etapa de regulación en una mejor posición. Como resultado, la situación del jurel se agravó aún más en 2010. De hecho, el grupo científico internacional de la propia Organización de Pesca del Pacífico Sur, se reunió en Viña del Mar en octubre del 2010, reafirmó que la especie se halla en situación muy crítica: su biomasa se redujo en casi 80% desde 2001, alcanzando su mínimo histórico. El mismo informe señaló que de no adoptarse medidas drásticas inmediatas, la biomasa se extinguiría irremediablemente en 10, y sugirió reducciones entre 50 y 70% de las capturas reales a la fecha.
En consonancia con lo anterior, Chile aprobó la reducción de la pesca de jurel en 60%, lo que ha provocado reacciones encontradas. En la zona norte se quejan de que tal reducción afecta menos a la zona sur, pues las 200 mil toneladas asignadas eran las que ya se estaban pescando; a su vez, las empresas de la zona sur afirman que en el norte están pescando ejemplares de pequeño tamaño, afectando aún más la recuperación de la biomasa. Los parlamentarios regionales se preocupan de la situación laboral de los trabajadores de las empresas eventualmente afectadas.
Los interes de corto plazo de empresas y trabajadores se contraponen con los de largo plazo de la industria y del país. Cabe a los gobiernos resolver finalmente ese problema. En ese marco es alentador el que Chile y Perú ratificaran su compromiso con este acuerdo en la reunión de jefes de Estado el pasado mes de enero".
Editorial: Protección de un gran recurso pesquero
A continuación reproducimos una editorial publicada hoy por El Mercurio:
"La pesca del jurel ilustra las dificultades en las que se desenvuelve la captura de bienes (los peces) sobre los cuales no hay -hasta este momento- posibilidad de adjudicar derechos de propiedad. Así, la pesca indiscriminada de una especie -en este caso el jurel- impone riesgos de extinción de ella si la tasa de reproducción es menor que la de su captura. A su vez, la tasa de reproducción no es completamente conocida, sino solo puede ser estimada, por la dificultad de medir con precisión la biomasa existente y conocer con detalle la biología de su desarrollo. Los países más activos en las pesquerías mundiales intentan ponerse de acuerdo frente a este problema imponiendo cuotas de captura. Sin embargo, pueden controlar directamente sólo lo que ocurre dentro de las zonas de su soberanía marítima -200 millas en el caso chileno-, pero lo que se haga más allá de ellas por parte de los buques factoría queda fuera de su control, ya que éstos puedes autoabastecerse o tener flotas de apoyo que lo hagan, burlando así los controles y evitando sanciones, a menos que sus países de origen tomen acciones al respecto.
En 2006, Chile, Australia y Nueva Zelanda copatrocinaron una negociación internacional multilateral destinada a la creación de una organización regional de pesca, con el propósito de contribuir a conservar los recursos pesqueros en el pacífico Sur y a ordenar su manejo. En noviembre de 2009 se adoptó el texto de la Convención para la Conservación y Ordenamiento de los Recursos Pesqueros en Alta Mar en el Océano Pacífico Sur. Hasta esa fecha, los 26 países y entidades participantes en las negociaciones, 12 han firmado esa convención, Nueva Zelanda, Islas Cook, Chile, Colombia, Perú, Islas Faroe (incluyendo su ratificación), la Unión Europea, China, Australia, Corea, la Federación Rusa y Cuba.
Las medidas previstas por dicho instrumento apuntan a determinar una captura total permisible y a distribuirla entre quienes participen en la pesquería. Eso condujo a una "carrera olímpica" entre los países para mejorar su participación relativa en dicha captura, y comenzar la etapa de regulación en una mejor posición. Como resultado, la situación del jurel se agravó aún más en 2010. De hecho, el grupo científico internacional de la propia Organización de Pesca del Pacífico Sur, se reunió en Viña del Mar en octubre del 2010, reafirmó que la especie se halla en situación muy crítica: su biomasa se redujo en casi 80% desde 2001, alcanzando su mínimo histórico. El mismo informe señaló que de no adoptarse medidas drásticas inmediatas, la biomasa se extinguiría irremediablemente en 10, y sugirió reducciones entre 50 y 70% de las capturas reales a la fecha.
En consonancia con lo anterior, Chile aprobó la reducción de la pesca de jurel en 60%, lo que ha provocado reacciones encontradas. En la zona norte se quejan de que tal reducción afecta menos a la zona sur, pues las 200 mil toneladas asignadas eran las que ya se estaban pescando; a su vez, las empresas de la zona sur afirman que en el norte están pescando ejemplares de pequeño tamaño, afectando aún más la recuperación de la biomasa. Los parlamentarios regionales se preocupan de la situación laboral de los trabajadores de las empresas eventualmente afectadas.
Los interes de corto plazo de empresas y trabajadores se contraponen con los de largo plazo de la industria y del país. Cabe a los gobiernos resolver finalmente ese problema. En ese marco es alentador el que Chile y Perú ratificaran su compromiso con este acuerdo en la reunión de jefes de Estado el pasado mes de enero".
Noticia publicada el: 09/02/11
Por bajas cuotas de captura: Similar escenario chileno de fusiones podría darse en Perú
Un panorama similar al que se ha venido dando en Chile en relación con la fusión entre empresas, podría darse en Perú. Ejecutivos de las compañías pesqueras del país vecino esgrimieron los mismos argumentos: bajas cuotas de captura, en su caso, la anchoveta.
Las constantes suspensiones que ha determinado el Ministerio de la Producción de Perú (Produce), gatillado, fundamentalmente, por el fenómeno del niño y la alta presencia de juveniles, tienen a la industria pesquera peruana atravesando por un difícil momento. A esto, se suma la veda de jurel que se extenderá hasta el próximo lunes 28 de febrero.
De acuerdo con el analista de Nordea Markets Kolbjorn Giskeodegard, las fusiones entre empresas serían un escenario que no parece lejano. "En Perú se puede esperar lo mismo que ha pasado en Chile", puntualizó. Sobre las razones, el ejecutivo explicó que "las bajas cuotas de capturas se han transformado en una detonante para pensar en una reestructuración del sector".
Las repetidas suspensiones solo han permitido capturar un 36% del total de 2 millones de toneladas estipuladas para la segunda temporada de captura, la cual, en primera instancia, concluiría el pasado lunes 31 de enero.
"Todas las compañías que operan en Perú se han visto afectadas fuertemente con esta situación", agregó Giskeodegard a Intrafish. Esta lista incluye a pesqueras del tamaño de China Fishery Group, Exalmar y Copeinca, esta última la segunda compañía anchovetera más grande del país.
El CEO de Copeinca, Samuel Dyer, aseveró que las fusiones son una posibilidad. "Este panorama es posible", subrayó. Aún así, el ejecutivo comentó que por lo pronto seguirán buscando otras alternativas para aumentar sus cuotas de captura. En ese sentido, dijo que se "debe tener claro que la mayoría de los actores del sector están bien parados financieramente, por lo que se debe evaluar caso por caso".
Aun considerando las bajas capturas de anchoveta, desde Copeinca insisten que el 2011 será un buen año en términos económicos. "Este año tendremos precios récords en la mayoría de nuestros productos. El primer trimestre será negativo como consecuencia de la pobre temporada de anchoveta que estamos teniendo. Sin embargo, esta situación se irá normalizando a lo largo del 2011", concluyó Dyer.
Por bajas cuotas de captura: Similar escenario chileno de fusiones podría darse en Perú
Un panorama similar al que se ha venido dando en Chile en relación con la fusión entre empresas, podría darse en Perú. Ejecutivos de las compañías pesqueras del país vecino esgrimieron los mismos argumentos: bajas cuotas de captura, en su caso, la anchoveta.
Las constantes suspensiones que ha determinado el Ministerio de la Producción de Perú (Produce), gatillado, fundamentalmente, por el fenómeno del niño y la alta presencia de juveniles, tienen a la industria pesquera peruana atravesando por un difícil momento. A esto, se suma la veda de jurel que se extenderá hasta el próximo lunes 28 de febrero.
De acuerdo con el analista de Nordea Markets Kolbjorn Giskeodegard, las fusiones entre empresas serían un escenario que no parece lejano. "En Perú se puede esperar lo mismo que ha pasado en Chile", puntualizó. Sobre las razones, el ejecutivo explicó que "las bajas cuotas de capturas se han transformado en una detonante para pensar en una reestructuración del sector".
Las repetidas suspensiones solo han permitido capturar un 36% del total de 2 millones de toneladas estipuladas para la segunda temporada de captura, la cual, en primera instancia, concluiría el pasado lunes 31 de enero.
"Todas las compañías que operan en Perú se han visto afectadas fuertemente con esta situación", agregó Giskeodegard a Intrafish. Esta lista incluye a pesqueras del tamaño de China Fishery Group, Exalmar y Copeinca, esta última la segunda compañía anchovetera más grande del país.
El CEO de Copeinca, Samuel Dyer, aseveró que las fusiones son una posibilidad. "Este panorama es posible", subrayó. Aún así, el ejecutivo comentó que por lo pronto seguirán buscando otras alternativas para aumentar sus cuotas de captura. En ese sentido, dijo que se "debe tener claro que la mayoría de los actores del sector están bien parados financieramente, por lo que se debe evaluar caso por caso".
Aun considerando las bajas capturas de anchoveta, desde Copeinca insisten que el 2011 será un buen año en términos económicos. "Este año tendremos precios récords en la mayoría de nuestros productos. El primer trimestre será negativo como consecuencia de la pobre temporada de anchoveta que estamos teniendo. Sin embargo, esta situación se irá normalizando a lo largo del 2011", concluyó Dyer.
noticia publicada el: 09/02/11
La FNE abrió investigación por fusión entre pesqueras Camanchaca y Bio Bio
La Fiscalía Nacional Económica (FNE) investigará la fusión entre las pesqueras Camanchaca -de los socios Jorge Fernández y Francisco Cifuentes- y Bio Bio -ligada a la familia Stengel-. Según lo argumentado por el ente fiscalizador, esto se daría debido a que existirían elevados índices de concentración para algunos mercados relevantes analizados, afectados por la operación.
"Los índices de concentración y sus variaciones superan los umbrales establecidos por la Guía Interna para el Análisis de Operaciones de Concentración Horizontales, específicamente en los mercados de cuotas individuales de pesca para las especies jurel (a nivel nacional), anchoveta (en las regiones de Los Ríos y Los Lagos) y sardina común (a nivel nacional)", explicó la entidad comandada por el fiscal Felipe Irarrázaval.
De igual manera, la FNE aseveró que se requiere analizar si la referida concentración en los mercados de extracción aumenta las barreras de entrada en los mercados nacionales de comercialización final de las especies mencionadas. "En definitiva, procede que esta Fiscalía evalúe los potenciales riesgos a la competencia que la operación preliminarmente analizada podría conllevar para los consumidores", subrayó.
La fusión Camanchaca-Bio Bio -el 70% de la propiedad quedará en manos de la primera y el 30% restante en la segunda- involucra la pesca pelágica de ambas empresas en la zona centro-sur, además de sus respectivas cuotas de jurel, sardina, anchoveta y langostino. De igual forma, las compañías acordaron aportar a la nueva firma sus flotas, plantas de procesamiento y congelados, áreas de descargas y mano de obra. Dicha unión se hizo efectiva ante la Superintendencia de Valores y Seguros (SVS) este lunes 7 de febrero.
Paralelamente, la FNE se encuentra investigando las fusiones de SouthPacific Korp con San José, y la de Itata con El Golfo. Las tres uniones han llevado a que entre estas compañías concentren en torno al 65% de las cuotas totales de captura de jurel en la zona centro-sur.
La FNE abrió investigación por fusión entre pesqueras Camanchaca y Bio Bio
La Fiscalía Nacional Económica (FNE) investigará la fusión entre las pesqueras Camanchaca -de los socios Jorge Fernández y Francisco Cifuentes- y Bio Bio -ligada a la familia Stengel-. Según lo argumentado por el ente fiscalizador, esto se daría debido a que existirían elevados índices de concentración para algunos mercados relevantes analizados, afectados por la operación.
"Los índices de concentración y sus variaciones superan los umbrales establecidos por la Guía Interna para el Análisis de Operaciones de Concentración Horizontales, específicamente en los mercados de cuotas individuales de pesca para las especies jurel (a nivel nacional), anchoveta (en las regiones de Los Ríos y Los Lagos) y sardina común (a nivel nacional)", explicó la entidad comandada por el fiscal Felipe Irarrázaval.
De igual manera, la FNE aseveró que se requiere analizar si la referida concentración en los mercados de extracción aumenta las barreras de entrada en los mercados nacionales de comercialización final de las especies mencionadas. "En definitiva, procede que esta Fiscalía evalúe los potenciales riesgos a la competencia que la operación preliminarmente analizada podría conllevar para los consumidores", subrayó.
La fusión Camanchaca-Bio Bio -el 70% de la propiedad quedará en manos de la primera y el 30% restante en la segunda- involucra la pesca pelágica de ambas empresas en la zona centro-sur, además de sus respectivas cuotas de jurel, sardina, anchoveta y langostino. De igual forma, las compañías acordaron aportar a la nueva firma sus flotas, plantas de procesamiento y congelados, áreas de descargas y mano de obra. Dicha unión se hizo efectiva ante la Superintendencia de Valores y Seguros (SVS) este lunes 7 de febrero.
Paralelamente, la FNE se encuentra investigando las fusiones de SouthPacific Korp con San José, y la de Itata con El Golfo. Las tres uniones han llevado a que entre estas compañías concentren en torno al 65% de las cuotas totales de captura de jurel en la zona centro-sur.