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jueves, 30 de diciembre de 2010

Noticia publicada el: 29/12/10
Presidente de la Asipes: "Pese a que se privilegiará el consumo humano, las plantas tendrán capacidad ociosa importante en el 2011"
A raíz del terremoto y tsunami que afectaron gravemente al 50% de las plantas de Talcahuano y Coronel (en la Región del Biobío), la escasez de jurel que redujo los desembarques en un 60% y un dólar excepcionalmente bajo, el presidente de la Asociación de Industriales Pesqueros (Asipes), Roberto Izquierdo, calificó el 2010 como extremadamente complejo para el sector pesquero de la zona centro sur.
"El 2011 será un año tan complejo como el 2010", anticipó el dirigente gremial, recordando que el Consejo Nacional de Pesca (CNP) aprobó una drástica disminución en las cuotas de captura para el 2011 de las principales especies, decisión que fue apoyada por la Asipes en pos de la conservación y recuperación de los recursos y que contó con la negativa del norte, "ya que Corpesca desea continuar pescando jurel bajo talla mínima legal, y aparentemente lo va a conseguir", agregaron desde la entidad que agrupa a los industriales de la zona centro sur.
Por ello, Izquierdo sostuvo que en el caso del jurel, para el que se fijó una cuota país de 315 mil toneladas (equivalente a un cuarto de la aprobada para el 2010, de las cuales 220 mil toneladas corresponden a la zona centro sur), se privilegiará el destino de las capturas a la elaboración de productos para consumo humano con valor agregado (congelados, apanados y conservas), intensivos en mano de obra, lo que a su vez contribuirá a valorizar mejor la escasa materia prima.
No obstante, el presidente de la Asipes recalcó que ya durante el 2010 la escasez de jurel y el terremoto provocaron que las plantas de consumo humano, certificadas para exportar a los mercados más exigentes, quedaran con capacidad ociosa, lo cual impactó la productividad y el empleo.
Balance 2010
En temas más específicos, Izquierdo recordó el duro impacto del terremoto y tsunami en la industria pesquera, aseverando que de las 35 plantas pesqueras asociadas al gremio (que entregan en total 13 mil empleos directos) 18 sufrieron "daños severos", con un costo de US$ 300 millones en pérdidas sólo en infraestructura dañada.
Desembarques
Precisamente, el terremoto fue una de las causas en la disminución de los desembarques por motivo de los destrozos en las industrias que no podrían recibir pesca. Izquierdo informó que durante enero y octubre los desembarques pesqueros en la zona centro sur -efectuados desde las regiones de Valparaíso a la de Los Lagos en todas las especies- evidenciaron una caída de un 42% en comparación con el 2009. Éstos totalizaron 1.048.981 toneladas, mientras que el 2009 sumaron 1.823.625 toneladas.
El jurel, principal recurso pelágico del país, registró una caída del 61,8%, desembarcándose 228.177 toneladas; la sardina común, por su parte, mostró una disminución en sus desembarques del 24,5%; la anchoveta tuvo una caída del 53%, la merluza común una baja del 3,8% y la merluza de cola una disminución de un 12% en las toneladas desembarcadas.
"La baja en los desembarques durante el 2010 se debió principalmente a la paralización que sufrió la flota durante marzo y abril a raíz de los daños producidos en las descargas, la preferencia que se dio en los meses posteriores al terremoto al desembarque de sardina y anchoveta de lanchas artesanales con una finalidad social, demorando el inicio de la operación de las naves industriales, así como a la poca disponibilidad del jurel y otras especies en los meses siguientes", dijo Izquierdo.
Exportaciones
En cuanto a las exportaciones del sector pesquero de la zona centro sur, entre enero y octubre, éstas registraron una baja del 40%.
El presidente de la Asipes informó que se obtuvieron retornos por US$ 334.127.300, mientras que en el mismo período del 2009 éstos alcanzaron US$ 554.642.300.
El total de las toneladas de productos enviados al exterior mostraron una caída del 60% totalizando 206.336, a diferencia del año anterior en que éstas fueron de 509.709. En el caso de la harina de pescado, esta registró una variación negativa del 33% en los retornos, obteniendo por este concepto US$ 219.568.600, mientras que el año anterior éstos sumaron US$ 328.539.800.
En relación con los productos congelados, éstos mostraron una disminución del 50% alcanzando retornos por US$ 74.996.800, a diferencia del mismo período del 2009 en que éstos llegaron a US$ 150.982.500. "Esta baja se debió principalmente a la escasez del recurso jurel", agregó el presidente de la Asipes.
Por su parte, la merluza común mostró una variación negativa de un 4% en los envíos de sus congelados, obteniendo retornos durante el período enero-octubre del 2010 de US$ 17.593.500, a diferencia del mismo lapso del año anterior en que se lograron US$ 18.348.900. Las toneladas exportadas totalizaron 7.781, un 3,2% menos que las registradas durante el 2009.
En cuanto a las conservas, elaboradas principalmente en base a jurel, mostraron una baja del 52% totalizando durante el período enero-octubre US$ 29.030.300, mientras que el 2009 se obtuvieron US$ 61.089.800.
Ventas nacionales
En relación con las ventas nacionales durante el 2010, la harina de pescado representó retornos aproximados a los US$ 215 millones los que corresponden a 130 mil toneladas de ese producto, las que se utilizan principalmente en la industria salmonicultora. De igual manera, el aceite de pescado significó retornos por US$ 50 millones como consecuencia de las 50 mil toneladas vendidas.
Las ventas de conservas dentro del país por su parte, significaron retornos por US$ 12 millones lo que equivale a 640 mil cajas.
En cuanto a las ventas de congelados de pesca blanca, los retornos estimados fueron de US$ 1,8 millones lo que corresponde a 850 toneladas.
El total vendido por la zona centro sur a nivel nacional alcanzó los US$ 279 millones.
Total de las ventas de la zona centro sur
Si se suman las exportaciones (enero-octubre) y las ventas nacionales (año 2010) puede apreciarse que éstas representaron en harina de pescado US$ 434.568.600, en aceite US$ 50 millones, en conservas US$ 73.089.800 y en congelados US$ 76.796.800. Esto es un total de US$ 634.455.200.